Correr en la tercera edad es un gran beneficio para la salud. Desde décadas atrás esta actividad ha sido sugerida y promovida para minimizar problemas cardiacos y arteriales. Desde luego que no todas las personas que transitan por este momento de sus vidas deben comenzar a correr sin antes tener un claro panorama clínico analizado por un medico.

Durante 2008 han culminado varias investigaciones relacionadas con la actividad; una de las mas curiosas, es la de un estudio realizado en Estados Unidos, donde intervinieron mas de mil personas implicadas en la actividad de correr.

La Investigación

Durante más de veinte años, un grupo de investigadores supervisó la actividad de 500 personas adultas que corrían regularmente, y los comparó con un grupo semejante de personas en su mayoría sedentarias y en todos los casos no corredoras. Las edades de los individuos observados, eran en su mayoría de alrededor de cincuenta años al comenzar el experimento.

Al pasar diecinueve años, el 34% de los no corredores había fallecido contra sólo el 15% de los corredores. En ambos grupos se experimentaron problemas físicos, sin embargo los integrantes del grupo que corría habitualmente los manifestaron dieciséis años mas tarde que su opositor. Muchos científicos lograron comprobar con la investigación realizada por el equipo de Stanford University Medical Center que en realidad los problemas de los huesos atribuidos a la actividad física en la vejez, no son ni fueron nunca reales.

El titulo

Correr o hacer cualquier actividad física interviene en forma beneficiosa en cualquier organismo. En el caso de la vejez, no se debe confundir el cansancio del peso de los años con los síntomas de una enfermedad. Cuando la noticia de la investigación salio a la luz, la mayoría de los titulares en revistas especializadas afirmaban que “correr prolonga la edad de vida”, o “correr mantiene la juventud”, en realidad me inclino a pensar en el envejecimiento como una etapa de nuestra existencia, donde si realizamos alguna actividad física mejoraremos considerablemente nuestra calidad de vida, y esto se notara en nuestra salud principalmente.

Estos estudios científicos donde se corroboran o descartan mitos e inquietudes, ayudan a las personas en su conjunto a ver clarificadas muchas cosas que acontecen en la vida diaria, incluso en la práctica deportiva, como el estudio de la euforia y endorfinas en los individuos que corren, pero de este ultimo tema hablaremos en otra nota.

Via correr.es