La artritis es una dolencia que se produce cuando una o más articulaciones se inflaman. Este problema puede resultar muy doloroso para quienes lo padecen y puede disminuir significativamente su calidad de vida ya que, en ocasiones, impide realizar las actividades con normalidad.

A día de hoy, se han descubierto más de 100 tipos diferentes de artritis y enfermedades similares, entre las que se incluyen las asociadas a huesos, los músculos, las articulaciones y los tejidos que las sostienen. Por suerte, también se han descubierto varios tratamientos para controlarla y reducir los síntomas de quienes la padecen.


¿Cuál es la causa de la artritis?

Existen diferentes causas asociadas a la aparición de artritis, pero la más común es por desgaste del cartílago que protege las articulaciones. Un cartílago normal permite que las articulaciones se muevan suavemente y sin problema, mientras que un cartílago desgastado hace que los huesos se rocen y provoquen dolor, inflamación y rigidez.

La artritis puede ser la consecuencia de problemas como una enfermedad autoinmunitaria, fractura ósea, “desgaste y deterioro” general de las articulaciones,  o una infección provocada por algún tipo de virus o bacteria.

Como dijimos anteriormente, existen más 100 tipos de artritis y problemas asociados a esta dolencia, pero los tipos de artritis más comunes son la artritis reumatoide y la osteoartritis.

Otros tipos de artritis comunes:

    Espondilitis anquilosante.
    Artritis, gota o pseudogota inducidas por cristales.
    Infecciones bacterianas.
    Artritis psoriásica.
    Artritis reactiva (síndrome de Reiter).
    Lupus eritematoso sistémico (LES).

¿Cuáles son los síntomas de la artritis?

Las personas que sufren de artritis suelen sentir dolores frecuentes e intensos en sus articulaciones. Pero, además de las molestias, los síntomas de artritis también pueden abarcar:

    Inflamación articular.
    Disminución de la capacidad para mover la articulación.
    Enrojecimiento y calor en la piel alrededor de una articulación.
    Rigidez articular.

Alivia los dolores de la artritis con este remedio natural

La medicina natural alternativa ofrece diferentes remedios que nos pueden ayudar a aliviar diferentes dolencias, como la provocada por la artritis. En este caso, vamos a aprovechar los beneficios de tres ingredientes muy poderosos como lo son: el ajo, la miel y el vinagre de manzana.

El ajo es un ingrediente con muchas aplicaciones medicinales, que se utiliza frecuentemente en diferentes tratamientos gracias a sus propiedades antibióticas, antivirales, antioxidantes y analgésicas. En el caso de la artritis, el ajo actúa como un poderoso analgésico y antiinflamatorio que puede reducir el dolor y mejorar la salud de quien lo padece.

El ajo también estimula la eliminación de toxina y desechos acumulados en el cuerpo, por lo que contribuye a la reducción de la inflamación que provoca la artritis.

Por su parte, la miel es un alimento rico en propiedades para la salud, que ayuda a mejorar el estado de las articulaciones por sus propiedades antibióticas, antivirales y su efecto calmante. La miel puede contribuir a la lubricación de las articulaciones y gracias a esto ayuda a reducir el dolor.

Finalmente utilizaremos vinagre de manzana, que es un producto con muchas aplicaciones en la salud, ideal para combatir infecciones y diferentes dolencias. Este producto, tan económico y fácil de adquirir, ayuda a reducir las inflamaciones y gracias a esta acción disminuye el dolor en rodillas, manos, codos, caderas o cualquier otra área del cuerpo.
¿Qué cantidades necesito?

    1 taza de vinagre de sidra de manzana orgánico (250 ml).
    1 taza de miel de abejas pura (335 g).
    8 dientes de ajo.

¿Cómo preparar este remedio natural?

    La forma de preparar este remedio natural es bastante simple. Tritura los dientes de ajo. En un recipiente debes agregar la taza de vinagre de sidra de manzana orgánico, la taza de miel de abejas pura y los 8 dientes de ajo triturados.
    Mezcla muy bien todos los ingredientes hasta que queden completamente incorporados y una vez listo, consérvalo en el refrigerador durante 5 o 7 días para que macere bien.

Dosis: La forma adecuada de tomar este remedio natural para aliviar los dolores de la artritis es consumiendo 2 cucharadas diarias de la mezcla en un vaso de agua tibia o jugo de frutas natural. Se debe tomar en ayunas y, para mejores resultados, puedes tomar la misma dosis por las noches antes de ir a dormir.

Este remedio lo debes consumir todos los días, en la dosis recomendada, para obtener buenos resultados. Si bien, estos no son inmediatos, consumiéndolo a diario, pronto empezarás a sentir mejoría.

Via mejorconsalud.com