Así, inicia un refrán popular y representa una gran verdad. ¿Cuántas veces hemos visto a los adultos mayores, jubilados o pensionados, sobre todo a mujeres mayores, que padecen algún problema en los pies?
En ocasiones, se trata de más de uno; entre callosidades, juanetes, uñeros, dedos en martillo, dedos montados o entrelazados como consecuencia del uso de zapatos estrechos y puntiagudos.
Muchas de estas personas piensan que ir al podólogo puede ser excesivamente costoso, temen daños en el hueso, sospechan que el remedio será peor que la dolencia, o sencillamente no encuentran a un especialista de los pies cerca de sus hogares.
Entonces, en la mayoría de los casos, las personas mayores deciden paliar el problema al usar cotidianamente huaraches, chanclas o pantuflas.
Esas pequeñas o grandes molestias, en uno o en ambos pies, irá acelerando el proceso de envejecimiento personal. Cada vez saldrán menos a la calle o no caminarán bajo el pretexto de que les duelen los pies. Lo que antes eran sólo algunas dolencias físicas, se podrán convertir en serios problemas de salud física y mental que afectarán la vida de estas personas.
Tipo de calzado recomendable
Los zapatos deben lucir por su comodidad, no por su aspecto. La suela de goma es muy aconsejable para evitar resbalones y caídas.
Cuando elijas un calzado, el mejor es el tipo mocasín, debido a que es más amplio y representa menor dificultad para calzarlo.
Los zapatos con agujetas puede ser un riesgo para la persona mayor; puede pisarlas y tropezar. Sin embargo, son una buena alternativa para aquellos adultos que sufren hinchazón en piernas y pies.
Es fundamental que los calcetines o medias jamás opriman los miembros inferiores; se corre el riesgo de ocasionar isquemia (falta de oxigenación) y problemas circulatorios graves.
Un elástico ancho y flojo es el indicado para los calcetines de los adultos mayores. Recuerda que un ser humano limpio y bien vestido mantendrá su ánimo en alto, su actitud será positiva y esto repercutirá definitivamente en su estado de salud.
Via bienestar.salud180.com
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