Un estudio realizado sobre casi 300 personas en Pittsburgh que caminaban cada semana, mostró en aquellos que recorrían por lo menos seis millas semanales que tenía menos contracción del cerebro relacionada con la edad, comparadas con las personas que caminaban menos.
Si se reduce el tamaño del cerebro en la adultez tardía puede causar problemas de memoria, por lo tanto estos resultados deberían alentar a ensayos bien diseñados de ejercicio físico para los adultos mayores, como un enfoque prometedor para la prevención de la demencia y la enfermedad de Alzheimer, dijeron los especialistas de la Universidad de Pittsburgh, cuyo estudio fue publicado en la revista Neurology.
La enfermedad de Alzheimer representa la forma más común de demencia, ya que poco a poco mata a las células del cerebro, pero las actividades físicas como caminar han demostrado que pueden construir el volumen del cerebro, evitando o retrasando la enfermedad.
Via .nutridieta.com
