Al día de hoy más de 15 millones de personas mayores que sufren de degeneración de la mácula debida a la edad, cifra que, se espera, crecerá considerablemente a medida que la generación de la segunda posguerra se acerque a la edad de la jubilación.

Si bien el riesgo se incrementa, la concientización y la información son las claves para atender y preservar la vista de millones de habitantes.

El Dr. Salomon Melgen, oftalmólogo, exhorta a la población estadounidense en riesgo a prevenir los problemas de la vista asociados al envejecimiento mediante exámenes periódicos y conversaciones con sus oftalmólogos acerca de la rehabilitación de la pérdida visual en caso de padecerla.


Febrero es el mes de concientización sobre la degeneración de la mácula y la pérdida visual debidas a la edad, iniciativa que representa la oportunidad de informar y sensibilizar a la población en cuanto a la principal causa de pérdida visual en adultos mayores de 65 años.
La mayoría de los pacientes hace caso omiso de los primeros síntomas de degeneración de la mácula o esperan hasta sufrir un deterioro importante de la vista para acudir al consultorio médico, ya que este trastorno avanza lentamente. "El diagnóstico oportuno y el tratamiento desde el inicio del padecimiento pueden retrasar o frenar la degeneración de la mácula", aseguró el Dr. Melgen.

Algunos de los síntomas comunes son:

Parte del campo visual borroso o carente de definición.
Ver líneas distorsionadas y bordes ondulados.
Percibir los colores desteñidos, dificultad para leer y reconocer rostros.
Calidad visual que varía día a día o percepción de manchas oscuras en el centro del campo visual.

Diagnóstico

Según el Dr. Melgen, "el oftalmólogo puede detectar los primeros indicios de la enfermedad, antes de que aparezcan los síntomas. Por eso es tan importante someterse a exámenes periódicos a fin de detectar la degeneración macular debida a la edad".

Prevención

Afortunadamente hay técnicas para que los médicos detecten enfermedades del ojo aun cuando no haya síntomas, lo que permite administrar un tratamiento oportuno, capaz de aplazar el deterioro de la facultad visual.

Otras medidas preventivas que se aconseja tomar en cuenta son: evitar el tabaquismo, llevar una alimentación saludable, mantenerse activo, controlar la presión arterial y proteger los ojos del sol.

Fuente salud.aol.com